miércoles, 26 de abril de 2017

Mil picos y diez mil barrancos




Simon Leys

Dostoievski sufrió una crisis de epilepsia en el museo de Basilea, ante el Cristo muerto de Holbein. En la pintura occidental, de Grunewald a Goya, de El Greco a Van Gogh y a Munch, no faltan, me parece a mí, obras capaces de desencadenar semejantes accidentes en unos organismos hipersensibles. En cambio, sería inconcebible, por definición, que una pintura china produjera semejante efecto, aunque la violencia de un Xu Wei o la inquietante extrañeza de un Wu Bin o de un Chen  Hongshou realmente podrían invalidar esta afirmación. Sin embargo, solo hay una excepción: el angustiante Gong Xian de la colección Drenowatz (Mil picos y diez mil barrancos, Museo Ritberg, Zúrich); es una pintura tan densa, que ni gota de aire circula por ella: el único paisaje sofocante que yo conozca.


La felicidad de los pecesillos. Cartas de las antípodas. Acantilado, 2011,  p. 82.


domingo, 16 de abril de 2017

El amigo ido



Salvador Novo


Me escribe Napoleón:
"El Colegio es muy grande,
nos levantamos muy temprano,
hablamos únicamente en inglés,
te mando un retrato del edificio..."

Ya no robaremos juntos dulces
de las alacenas, ni escaparemos
hacia el río para ahogarnos a medias
y pescar sandías sangrientas.

Ya voy a presentar sexto año;
después, según las probabilidades,
aprenderé todo lo que se deba,
seré médico,
tendré ambiciones, barba, pantalón largo...

Pero si tengo un hijo
haré que nadie nunca le enseñe nada.

Quiero que sea tan perezoso y feliz
como a mí no me dejaron mis padres
ni a mis padres mis abuelos
ni a mis abuelos Dios.



domingo, 9 de abril de 2017

Canción cubista



José María Eguren


Alameda de rectángulos azules.

La torre alegre
Del dandy.

Vuelan
Mariposas fotos.

En el rascacielo
Un gallo negro de papel
Saluda la noche.

Más allá de Hollywood,
En tiniebla distante
La ciudad luminosa,
De los obeliscos
De nácar.

En la niebla
La garzona

Estrangula un fantasma.